JDH 3.11 El Regalo (Primera parte)

Descripcion Oficial
El Regalo (Primera parte)
Jeffrey escapa a los Angeles para encontrarse con Angel y entregarle el anillo de lapislazuli que le permitira caminar bajo la luz del sol y termina conociendo al mejor amigo de Angel, un sujeto divertido llamado Doyle que esta dispuesto a ayudarlo,  sin embargo Spike tambien llega a la ciudad para obtener el anillo y juega su ultima y peligrosa carta.

Los Ángeles California.

Ángel había pasado 2 días en la ciudad con un viejo amigo, había estado patrullando las calles toda la noche y acababa de salvar a una mujer de un traficante que no fue difícil de atrapar. Sin embargo Ángel no se había percatado de que Spike estaba en el techo de un callejón mirando y burlándose de la conversación con la chica que había salvado.

- ¿Cómo puedo darte las gracias… misteriosa criatura nocturna vestida de negro y hermosa?.

-No es necesario, señorita me basta con tus lágrimas de gratitud. Verás, antes era un vampiro malvado... pero el amor y una dichosa maldición me robaron mis colmillos y ahora soy un corderito bueno con dientes feos… Ayudar a los necesitados es mi trabajo y crear una gran tensión sexual... para luego irme pavoneándome como un magnífico maricón...es gratitud suficiente para mí.

-Comprendo… Tengo un sobrino que es homosexual..

- ¡No digas más! El mal anda suelto y ya casi no me queda esa gomina para mariquitas que tanto me gusta…. Rápido, vayamos al Angelmóvil. ¡Vámonos!

Esa era la forma en la que Spike se burlaba de la gratitud de la chica y de la historia de Ángel, después su ceño se frunció.

- Adelante Ángel…. Hazte el gran héroe fornido mientras aún puedas, te esperan unas cuantas sorpresas… El anillo de lapislázuli, una visita de tu viejo amigo Spike con tu pequeño elegido y sí... tu macabra y horrible muerte. - murmuraba Spike para si mismo.

Oz y Jeffrey iban llegando a los Ángeles después de haber pasado casi 4 horas escuchando la radio y cantando canciones de Rock clásico y otros géneros.

- Supongo que si hubiera usado mi súper velocidad pude haber llegado en menos de 1 hora aquí, pero eso me hubiera agotado… Gracias Oz, estas 4 horas han sido geniales con la música

- No me agradezcas aun, ¿tienes idea de donde encontraremos a Ángel?

- Bueno, no va a ser muy difícil… dijo que vendría a ayudar a las personas y… si bueno tome esto de su chaqueta la otra noche, es una dirección... de un tal Doyle. - dijo el niño dándole una tarje blanca a Oz, entonces el chico condujo para halla.

Ángel estaba quedándose en un edificio barato donde años antes había conocido a Doyle, juntos habían salvado a muchas personas en L.A.

- Tu primera victoria… felicidades has regresado a los Ángeles. —decía Doyle sin embargo Ángel no podía quita u cara triste mientras miraba por la ventana, sin dejar de pensar en Mistyc Falls.

Como atraídos por el pensamiento de Ángel, Oz apareció en el lugar.

-Hola, Los Ángeles. - exclamo Oz cuando puso su primer pie en el sitio, Ángel volteo am mirarlo y se quedo impresionado.

- ¿Oz? …. Me alegra verte.

- Igualmente Ángel, vine a dar un concierto... pero también traje algo... - dijo Oz, en ese momento Jeff entro caminando lentamente por la puerta, Ángel estaba conmocionado de verlo ahí, no lo podía creer.

- ¿Jeffrey? ¿Cómo llegaste aquí? - pregunto el vampiro

- Oz me trajo

- Dios no debiste venir… si John se entera…

- No me importa, ya se lo que te dijo… ya hable con el y bueno yo… te traje un regalo - dijo el niño sacando de la bolsa de su sudadera el anillo de lapislázuli, Ángel lo tomo rápidamente en sus manos y lo observo detalladamente.

- Espera un minuto. ¿Es lo que creo que es?

- Ho si… un anillo de lapislázuli, tranquilo no tiene dueño… así que puedes usarlo. - dijo Jeff con emoción, Ángel estaba petrificado pues siempre había querido tener uno de sus anillos mágicos.

- Genial.- dijo Doyle detrás de Ángel, así que el vampiro sin dejar de mirar el anillo presento a muchacho.

- Ah, él es Doyle… Trabaja aquí, entre comillas.- murmuro Ángel, Oz le dio la mano al sujeto quien no dejaba de mirar a Jeffrey.

-A ver si acierto, pero, ¿tú eres Jeffrey? ¿El elegido?- pregunto Doyle.

- Bien acertado.

-Vaya, aquí estás, en Los Ángeles... Esto es genial…. Escuche hablar mucho de ti, también te he investigado… se que eres muy inteligente.

- Gracias… entonces ¿tú eres como un detective?

- Ho no… no, Alnegl es el detective.

- ¿Deberás? ¿Tienes un sombrero y una pistola? - pregunto Jeff, Ángel por fin dejo de mirar el anillo y sonrió levemente.

- Nos interesaremos más por eso luego pero ahora mismo... concentrémonos en el premio gordo que acaba de ganar Ángel… ¿Que esperas, amigo? Póntelo…. Nos broncearemos en la piscina y conozco unos clubes de desnudistas... que tienen un buffet fabuloso de día que está delicioso, eso me dijeron. - agrego Doyle con gracia, Ángel solo lo miro con seriedad para que se callara.

- ¿Jeffrey estas seguro de que me quieres dar al anillo a mi?- le pregunto Ángel.

- Sí. - murmuro el niño. - Mi viejo amigo Spike lo buscó por todo el pueblo... Pero ya me encargue de él y se fue sin el anillo, lo quiero en manos seguras. - agrego.

- ¿Por qué no te lo pones? -sugiero Doyle.

- Quizá después. - dijo Ángel entre dientes.

- ¿Estás loco? Ángel, podrías….

- Dije que quizá después. - grito Ángel, haciéndole llegar el claro mensaje de"no te entrometas" a Doyle.

- Como quieras, pero... yo voy al bar a tomarme algo para celebrarlo… ¿Vienes, Oz? - pregunto Doyle.

- Sí, tengo hambre. - murmuro Oz, antes de salir y dejar a Jeffrey con Ángel para que hablaran.

- Ángel enserio… Quiero que tú tengas el anillo.

- Acompáñame.- fue todo lo que dijo Ángel, antes de empezar a caminar Jeff lo siguió hasta el estacionamiento del edificio, no comprendía por que estaban ahí.

- ¿A dónde vamos?- pregunto Jeff.

- Te llevare a casa.- respondió Ángel con seriedad.

.- Pero yo no quiero irme a casa.

- No me importa, tienes que regresar a Mistyc Falls… te necesitan haya Jeff

- Entonces ven conmigo, ayúdame Ángel.

- No, yo no me fui por lo que tu padre me dijo… me fui por que entendí que ese no es mi lugar, yo no puedo ser tu amigo sin retenerte… o ponerte en peligro. - explicaba Ángel cuando las risas de Spike se escucharon haciendo eco en el lugar, de repente el apareció delante de los chicos y golpeo a Ángel con una madera.

- Hola Ángel… Creo que tienes algo que busco: un anillo. ¿Lo has visto? - pregunto Spike con ironía.

- Será mejor que regreses a casa, Spike…. El anillo se quedará conmigo. - respondió Ángel empezando a pelear con Spike, Jeff se mantenía lejos el asunto de los vampiros pero estaba listo apara ayudar si Ángel lo necesitaba sin embargo Ángel parecía poder lidiar solo con Spike, pues le dio una gran pelea.

- ¿Por qué? ¿Porque eres Ángel el detective vampiro?... Ay, qué miedo te tengo y luego ¿qué sigue? ¿El vampiro vaquero?, ¿El vampiro bombero?, ¿La bailarina vampiro?.

- Me gusta usar las piernas. - respondió Ángel con la misma ironía de Spike. - Así que tú y yo debemos pelear ¿no? ¿Es tu gran plan para recuperar el anillo?- agrego Ángel, pateando a Spike y sometiéndolo contra el capo de un auto.

- Tengo un buen plan. - agrego Spike zafándose del agarre de Ángel.

- ¿Tú? ¿Un buen plan? Lo dudo mucho. - agregó Jeff con ironía, aun que el estaba tratando de mantenerse fuera de la conversación de los vampiros, no podía perder la oportunidad de burlase de su enemigo.

- Un plan inteligente y minucioso… Pero me aburrí, tantas horas vigilando y esperando sufrí calambres en las piernas.

- Ya basta de tonterías Spike y lárgate de aquí- advirtió Ángel.

- Dime dónde está el maldito anillo y lo hare… Además ese anillo no haría juego con tu conjunto.

- Ni con tu cara

- Conseguiré el anillo…. Esto no acabará hasta que uno de nosotros se convierta en polvo Ángel. - advirtió Spike y corrió, Oz y Doyle lograron ver esa parte de la pelea.

- ¿Qué ha pasado?- pregunto Doyle al ver la ropa llena de polvo de Ángel.

- Spike esta aquí, nos ataco. —respondió Jeff.

- ¿Estás bien?... Aún más importante: ¿y el anillo? - pregunto Doyle.

- Está bien… Pero no puedo decir lo mismo de ustedes dos…. Desaparezcan hasta que esto acabe, Spike quiere sangre. - dijo Ángel refiriéndose a Doyle y a Oz.

- Tengo que ir a mi concierto en una hora… pero no te preocupes Jeffrey, estaré en contacto por si me necesitan.

Doyle y Oz se fueron de aquella habitación, dejando a Ángel y Jeffrey solos para preparase del ataque venidero.

- ¿Y tú qué? No tardará en venir por ti.

- Lo sé.

- ¿Y qué vas a hacer?

- Encontrarlo primero.

- Bien, vámonos yo puedo ayudar.- dijo Jeff, entonces el y Ángel salieron a las calles para buscar pistas del paradero de su hermano, eran las 2 de a mañana cuando Ángel logro ingresar a un bar con música muy alta donde un informante podía tener información de Spike.

- No, Spice no…. Es el tipo que trabaja en Broadway…. Spike, con "k".

- ¿Es un vampiro?

- Sí, un vampiro, exacto.

-No, no he escuchado nada de el… lo siento

- De acuerdo, gracias. - dijo un Ángel molesto por haber perdido todo su tiempo en ese sitio, después salió a reunirse con Jeff pues el niño tuvo que esperar en el auto, pues no lo dejarían entrar a ese tipo de bares.

- Vámonos Frankie Trípode, no sabe nada.

- ¿Frankie Trípode?... Ah, ya lo entiendo, es un monstruo de 3 piernas, ¿verdad? - pregunto Jeff con ironía, Ángel negó con incredulidad.

- - No, es humano.

- ¿Y qué significa su nombre?

- Escucha Jeff, regresemos a la oficina de Doyle… necesitas dormir un poco, estas exhausto… Y no es una petición, es lo que vamos a hacer. - dijo Ángel, el sabia lo testarudo que podía llegar a ser el niño.

- No sabía que tenías auto Ángel… ¿Por qué no lo sacaste antes? Pudo haber sido de mucha ayuda cuando el coche de Giles se descompuso.

- En el pueblo no tengo necesidad de usarlo, es un lugar pequeño y soy ambientalista… además haya es mas fácil ocultarse con la súper velocidad que una ciudad como esta.

- ¿Sabes? Spike menciono que te conocía antes y hace rato me quedo claro que es verdad… Y yo bueno…

- ¿Quieres que te cuente la historia verdad?

- Lo agradecería mucho.

- Esta bien… mi historia con Spike se remonta al año 1500 cuando yo lo conocí lo llamaban William el sanguinario, era un chico tonto que escribía mala poesía que mataba el oído de las bellas jóvenes de esos días… Yo había convertido a una mujer llamada Drusilla en vampiro y…

- Esperas… ¿tú convertiste en vampiro a esa loca? -pregunto Jeff.

- ¿Tu conoces a Drusilla? ¿Ella sigue viva?

- Spike y Drusilla resucitaron a un demonio que quemaba a la gente por adentro... Fue algo muy raro con un brazo en una caja.

- ¿Un brazo en una caja? ¿El juez?- pregunto Ángel, Jeff asintió con la cabeza y el vampiro continuo con la historia.

- En parte yo tuve la culpa de todo eso… a Drusilla no solo la convertí en vampiro, también fui yo quien la desquicio… ella era una niña d familia, muy religiosa con el don de la premoción, cuando mi creadora… Darla.

- Hay por dios espera…. ¿Darla? ¿Una tipa rubia, ojos azules con muy mala actitud?

- Suena mucho a ella… déjame adivinar…. ¿también la conoces?

- Claro hace unos meses me quiso matar… no solo la conocí Ángel, también fui yo quien la mato - dijo Jeff, eso le cayo como un balde de agua fría a Ángel, si bien no había pensado en Darla en mucho tiempo, algo en su interior se sentía mal de escuchar acerca de su muerte.

- Esta bien, eso iba a pasar tarde o temprano… ella era bastante.. problemática, como sea ella fue quien eligió a Drusilla para ser vampiro, hicimos cosas terribles delante de ella antes de convertirla y cuando por fin paso… ella estaba completamente loca, pasamos mucho tiempo juntos viajando por el mundo… En uno de esos viajes conocimos a Spike… el se enamoro de Dru y ella de el, por lo que lo convirtió en vampiro… cuando yo me entere quise matar a William, su solo nombre era una abominación para los vampiros… fue por eso que se cambio el nombre a Spike… muchos vampiros lo hacen.

- ¿Tu lo hiciste?

- Si, mi verdadero nombre era Liam… pero mi pequeña hermana siempre dijo que yo era su Ángel, después de que la mate… opte ese nombre como purga a lo que le hice a mi familia… como sea Spike me demostró que era un buen aprendiz, supero todas mis pruebas y poco a poco le fui enseñando a ser como yo… a ser como Ángelus, hubo un tiempo en que solo vivimos el y yo juntos, convirtiendo niños como Connor en vampiros, pero lo que mas le gustaba hacer a el era… matar cazadores, mato a muchos.

- Eso… ¿Debería estar preocupado por eso?

- Preocúpate por todo lo que es Spike, podrá parecer un simple tonto pero no lo es.- dijo Ángel, para cuando llegaron a la oficina de Doyle Jeff ya estaba dormido en el auto por lo que Ángel lo cargo en sus brazos y lo llevo a la habitación. Después Ángel bajo a los túneles subterráneos y escondió el anillo, tenia que mantenerlo alejado de Spike.

Al día siguiente Ángel se despertó por el sonido del teléfono de la oficina, respondió y era Doyle

- Ángel, se que me pediste mantenerme lejos de esto… pero no pude hacerlo estuve investigando a nuestro amigo Spike.

- ¿Qué encontraste Doyle?

- Escucha, Manny el Puerco dijo... que no conocía para nada a un vampiro llamado Spike.

- ¿Y qué?

- Dijo eso antes de que yo mencionara a Spike… Lo encontrarás en un bar en la Calle 3 llamado la Sala Orbita. - dijo Doyle, Ángel colgó rápidamente y cuando se giro para salir observo a Jeffrey completamente vestido y duchado en la puerta.

- ¿Quién llamo?

- Era Doyle, sabemos donde esta Spike... iba para haya ahora.

- Te pusiste el anillo… ¿Podremos caminar en el sol?.- pregunto el niño.

- No... No me lo voy a poner todavía, Spike puede quitármelo y no podemos dejar que eso pasa… iremos por el subterráneo. - explico Ángel, Jeff acepto y mas tarde ambos estaban en el bar llamado Sala Orbita, no tardaron mucho en hallar a Spike.

- ¿Alguien te ha dicho alguna vez que eres un verdadero aguafiestas Ángel? - pregunto Spike quien aun seguía bebiendo de una cerveza.

- ¿Crees que puedes venir a mi ciudad y hacer esto?.. Nunca aprenderás, Spike.

- Quizá aprenda despacio, pero... acabo aprendiendo. - murmuro Spike, entonces la voz de una mujer diciendo algo raro se escucho, Ángel y Jeff voltearon a mirar y cayeron inconscientes

Mientras tanto Doyle y Oz esperaban en la oficina, noticias de sus amigos.

-Jeff ya debería de haber llamado… Esto me huele mal. - decía Oz.

-Quizá no… Quizá acabaron con Spike rápidamente y decidieron ir a surfear.

-No lo creo, Jeff no aria a eso sin llamar primero.

- Ángel tiene el anillo, ¿no?.. Seguro que está surfeando en la playa de Malibú ahora mismo... con su cabello al viento y chicas en bikini. - decía Doyle muy seguro de si, sin embargo Oz no estaba muy convencido de lo que estaba pasando.

Ángel abrió los ojos y tuvo problemas para divisar lo que estaba enfrente de el, estaba atado por las muñecas que sujetaban su cuerpo en aire, delante de el se encontraba Spike y otro sujeto mayor, vestido elegantemente.

-Marcus es un experto… Algunos dicen que es un artista, pero nunca me gustaron las etiquetas… Es el maldito rey de la tortura con humanos, demonios, políticos... da igual. Algunos dicen que inventó varias torturas clásicas... pero no me quiere decir cuáles… Detrás de su fachada fría, verás que es un tanto tímido, excepto con los niños...Te gustan los niños ¿verdad, Marcus?... Bueno, le gusta comerlos y otras cosas horribles. -se burlaba Spike.

- ¿Dónde esta Jeffrey?, si le han hecho algo yo voy a…

- Tranquilo Ángel, no te preocupes tanto por ese chiquillo y preocúpate por ti.- le dijo Spike, entonces el otro sujeto empezó a desabotonar la camisa de Ángel, después paso su mano por el pecho del vampiro.

- Su piel… más de 200 años de vida y qué poco daño externo ¿E interno?

- ¿Necesitan estar solos los dos o podemos empezar ya con la tortura? - pregunto Spike.

-Un vampiro con alma, obligado a recorrer la tierra haciendo buenas obras…

- Eso no supondrá un problema, ¿verdad Marcus?

-Al contrario, los seres con almas tienen algo que perder.

-Almas, dedos, dedos del pie, empecemos a cortar, ¿sí?... Quiero mi maldito anillo. - exigió Spike, el hombre seguía mirando de arriba abajo a Ángel.

- ¿Vas a torturarme o a matarme del aburrimiento? - pregunto Ángel, el hombre tomo una vara del fuego y se la clavo en un costado.

-Un poco de las dos cosas, seguramente. - murmuraba Marcus, mientras Ángel gritaba de dolor.

- ¡Quiero mi anillo! y si no lo consigo pronto... te clavaré una estaca ahora mismo. - amenazo Spike.

- ¿Ya acabaste? - pregunto Ángel con ironía.

-Sabe que no lo matarás hasta conseguir el anillo… Sabe que mientes.

-Pues consíguemelo Marcus.

-Muy pronto querrá decirme todo lo que sabe y más… El sabe que no miento. - dijo Marcus mientras se giraba a buscar nuevas armas.

-Eres un idiota, Spike. - murmuro Ángel.

- ¿Tú crees? Yo no estoy encadenado y tengo armas a mi alrededor.

-Contrataste a un vampiro… ¿Qué crees que hará con el anillo cuando lo encuentre? ¿Dártelo a ti?

-Cielos ¿Por qué no pensé eso?... Un momento, sí pensé en ello, contraté a un tipo a quien no le importa el anillo ni nada en este mundo... excepto descuartizar a gente pedazo a pedazo. Lo llaman una adicción, Ángel y todos las tenemos... Creo que la tuya se llama Pequeño tonto... Es adorable cuando sufre por tu amistad, ¿verdad?

-Me parece más adorable cuando te parte la cara. - dijo Ángel, en eso Marcus le lanzo otra varilla caliente en el pecho que lo hizo gritar.

-Creo que iré a tomar el aire, los dejaré solos. - dijo Spike mientras se iba, Marcus continuo torturando a Ángel con las varillas por un rato.

-Bueno, esto es divertido... pero pronto empezaré a aburrirme. La mayoría de las cosas que están vivas y respiran... odian la oscuridad y les encanta la luz. Pero nosotros somos diferentes ¿verdad?... Odiamos la luz del día y ella nos odia de vuelta…. Escondiste el anillo, Ángel cundo podrías estar caminando a la luz del día ahora mismo. Así que tengo que preguntarme, ¿Qué quieres si no es el anillo?

- Quiero que cierres tu maldita boca, pero no todos tenemos lo que queremos. - grito Ángel, el sujeto empezó a recorrer una varilla caliente por el rostro de Ángel.

-A través del dolor averiguamos la verdad sobre nosotros mismos… Nos despoja de nuestras defensas, nos hace inocentes de nuevo, como niños. Me gustan los niños… Estoy aquí para ayudarte a encontrar esa inocencia... aquí, con la luz.

Mientras la tortura de Ángel continuaba, Spike utilizo los túneles subterráneos para seguir con la siguiente fase de su plan, logrando llegar a la oficina de Doyle, donde no tuvo que esperar mucho para encontrarlo.

-Me encanta tu peinado. - le dijo Spike a Oz

-Ojalá pudiera decir lo mismo de ti… Ni un pasó más, idiota. - advirtió Oz, sin embargo Spike siguió acercándose al borde de la puerta mientras sonreía.

- ¿Por qué los buenos siempre van en grupo? ¿Y éste quién es? ¿El chico de la limpieza de Ángel? - se burlo Spike, Doyle saco una ballesta y le apunto a Spike.

-Las apariencias engañan, rubio.

-Ay, el irlandés tiene agallas.

-Quizá te parta por la mitad… ¿Quieres que use esto? - pregunto Doyle mostrando la ballesta.

-Morirás antes de que la flecha abandone el arco…. ¿Por dónde iba?, ha si estoy harto de buscar ese anillo… Deberían buscarlo Ustedes dos.

- ¿Y Ángel? ¿Y Jeffrey? - pregunto Oz.

- ¿Un tipo alto, apesadumbrado, con cejas de troglodita? Y ¿Un niño escuálido, con cara de tonto y mirada retraída?... A uno lo están torturando a muerte y al otro bueno esta en algo especial… Así que ¿Por qué no buscan ese anillo ustedes 2 y me lo dan? Y soltaré a sus amigos.

- No confío en ti. - murmuro Doyle.

-No me importa… Tienen hasta que anochezca para salvarlos, estaré en la pesquería Peterson's, entre Seward y Westminster…. No se demoren. -advirtió Spike antes de irse, Oz y Doyle se quedaron sin opciones a si que empezaron a buscar el anillo por todas partes, estaban seguros de que si Ángel lo tenía puesto entonces estaría en esa oficina.

Marcus estaba utilizando la luz del sol que entraba por el techo de la pescadería para quemar a Ángel en ciertas ocasiones, el vampiro estaba resistiendo lo más que podía hasta que Marcus saco una estaca de madera y con ella le rasguño el pecho.

-Hiciste cosas horribles cuando eras malo, ¿verdad? Y ahora te estás esforzando tanto por ser bueno, pero... no hay nada bueno o malo de por sí, es lo que pensamos…. Puedo hacer que el dolor desaparezca y como sabrás, puedo traerlo de vuelta, ¿Qué quieres, Ángel? … Creo que lo sé, pero quiero oírlo de tu boca…. Quiero la verdad, sabré si estás mintiendo. - decía Marcus.

-Quiero... ser perdonado. - murmuro Ángel.

-Sí, ésa es la verdad y quieres ganarte el perdón… No eres... de los que eligen el camino fácil, por eso me caes tan bien. Al final, no sentirás culpa... ni remordimientos ni nada, excepto una oscuridad total… Al final, el anillo, el pasado, nada de ello tendrá importancia… Serás libre, te lo prometo.

-Y yo te prometo que te mataré. - dijo Ángel tomando con los pies la estaca que Marcus había tirado, después impulso su cuerpo hacia atrás para clavársela al vampiro pero Spike apareció en ese momento y lo evito.

-Vamos, matar al torturador está estrictamente prohibido. - dijo Spike, el enfadado torturador tomo la estaca de las manos de Spike para matar a Ángel, pero Spike lo detuvo.

- ¡Tranquilo, grandullón! Aún necesito el anillo…. Ahora lo has hecho enojar… No querría estar encadenado como tú. - dijo Spike, Marcus siguió torturando a Ángel con la luz del sol.

El tiempo pasaba, Oz y Doyle habían destruido la oficina buscando el anillo, pero no había señal de el por ninguna parte.

- ¡Maldita sea!.. No está en el congelador y no está en el tanque del inodoro. En las películas, siempre está en uno de esos lugares. - dijo Oz.

-Hemos buscado por todas partes…. Excepto... - Doyle se quedo muy pensativo antes de salir corriendo, Oz lo siguió hasta el estacionamiento del lugar y ahí bajaron a otro sitio.

-Las cloacas infestadas de ratas que usa para moverse de día… es brillante - murmuraba Oz, después de haber camino unos pasos por el lugar Oz noto el movimiento de una madera en el suelo se agacho para levantarla y debajo de ella encontró el anillo.

-Vamos, tenemos que salvar a Jeff y Ángel. - exclamo Oz.

-No podemos darle a Spike lo que quiere para que nos mate…. Necesitamos un plan. - aseguro Oz y después de un tiempo de discutir el tema, se fueron a ver a Spike en al pescadería Peterson's, desde la camioneta vieron como Ángel era torturado e interrumpieron en el lugar.

- ¿Dónde está mi anillo?- pregunto Spike, saliendo de las sombras.

- No lo trajimos… Pero sabemos dónde está. - dijo Doyle bajando de la camioneta.

-De repente, me muero del aburrimiento… Se acaba el tiempo, muchachitos, denme el anillo las vidas de sus amigos dependen de ellos.

- ¿Quieres el anillo, desgraciado? Búscalo. - dijo Doyle arrojando el anillo desde su bolsa hasta la rendija de luz cerca de Ángel, en ese momento Oz saco una ballesta por la ventana de la camioneta y le disparo una flecha a Spike en el pie, el vampiro cayo en el piso.

Marcus el vampiro que torturaba a Ángel vio la oportunidad, recogió el anillo y desapareció a súper velocidad. Spike se dio cuenta del hecho y empezó a maldecir, mientras Doyle subía a Ángel a la camioneta de Oz.

- El tiene el anillo… es el único que sabe donde esta Jeffrey, tenemos que encontrarlo.- murmuraba Ángel débilmente, sin embargo Oz hizo lo que le pidió.

- Da la vuelta. - murmuro Oz.

- ¿Para hacer qué?... Es de día y no tienes el anillo, a menos que quieras convertirte en una antorcha humana, ni hablar. - se quejo Doyle al ver que Ángel se quitaba su gabardina negra.

-Tiene razón. Morirás abrasado... y no estás en condiciones de luchar contra un demonio torturador. - agrego Oz.

-Le gustan los niños... Oz, da la vuelta… No pudo ir muy lejos. - ordeno Ángel al recordar que a pocas calles de ahí estaba a playa, donde muchos niños solían estar juntos, sin embargo Marcus ya estaba ahí disfrutando del sol y sonriéndole a todos los niños pero Oz condujo a toda velocidad hacia la playa.

-Maldita sea, yo acabaré con él.

- ¿Estás seguro Ángel?

- Sí. - murmuro el vampiro, entonces abrió la puerta de la camioneta y con la súper velocidad llego hasta Marcus tirándolo por debajo del puente del muelle para que la luz del sol no lo dañara.

- ¿Qué vas a hacer? ¿Matarme? - se burlaba Marcus.

-Después de todo, te lo prometí…. No conseguiste hacerme hablar, lo intentaste, pero fracasaste eso sí que tiene que ser una tortura… Ahora dime ¿Dónde tienes a Jeffrey maldito?

- Ho jamás lo volverán a ver. -

- ¿Dónde esta?

- En casa… El esta ahí…. Considéralo como un regalo. - dijo Marcus entre risas, Ángel le arranco el anillo del dedo y después lo arrojo hacia la luz del sol, Marcus se encendió en llamas en segundos y murió.

Ángel miro el anillo unos segundos y se lo puso lentamente, después subió por el puente del muelle mientras contemplaba lo hermoso que era el sol, era mejor de lo que recordaba.

- ¿Ángel? Estas caminando en el sol...Es grandioso. - dijo Doyle, entonces Ángel recordó que tenia que encontrar a Jeff así que regreso a la camioneta de Oz y a toda velocidad regresaron a la oficina.

Ángel mantenía el rostro de vampiro en todo momento, rompió la puerta de la entrada de la oficina con mucha fuerza y se encontró con una mujer ahí parada, con Jeff a su lado en el sofá mientras ella le lanzaba una luz azul de sus manos.

- !Jeffrey¡ - grito Ángel.

- Es tarde vampiro.- dijo la mujer con una sonrisa, entonces hubo una explosión luminosa que dejo a Ángel inconsciente para unos minutos, para cuando el vampiro abrió los ojos y la mujer ya no estaba, pero tampoco Jeff o al menos eso parecía.

- ¿Qué paso? ¿Dónde esta Jeffrey? - pregunto Ángel.

- Ángel, tienes que calmarte- dijo Oz.

- ¡Donde esta! - grito el vampiro.

- Esta aquí.- murmuro Doyle quien venia entrando de la otro habitación, con un bebe en sus brazos, Ángel se quedo impactado… no podía ser otra cosa Jeff era el bebe que su amigo sostenía en sus brazos.