domingo, 30 de septiembre de 2012

JDH 4.04 Al otro lado del espejo

Descripcion
Al otro lado del espejo
Tyler Lockwood lleva a Jeffrey a las viejas propiedades de los fundadores del pueblo, en el lugar Jeff encuentra una misteriosa caja de espejo negro que lo lleva a una version paralela de su realidad, una donde Angelus es su padre vampiro y ademas un poderoso vampiro llamado Mikael tiene el control del pueblo, un Jeffrey malo llega a nuestra realidad y provoca un desorden.


Tyler Lockwood había llamado para invitar a Jeff a visitar un lugar secreto de la familia en el bosque, Tyler describía el lugar como un sótano abandonado, parecido a una espeluznante prisión y sembró la duda en Jeff quien acepto acompañarlo.

- ¿Tyler estas seguro de que podemos venir aquí? - pregunto Jeff con duda, estaban en una parte del bosque que parecía muy peligrosa para que un niño normal anduviera solo por ahí.

- Vamos Benson, ¿no me digas que te da miedo?

- Es Winchester ahora… Y no, no me da miedo - dijo Jeff haciendo un énfasis e3special en su nuevo apellido, aun no habían llegado los papeles legales pero ya se estaba haciendo a la idea de ser un Winchester.

- ¿Winchester? ¿De donde ha salido eso? - pregunto Tyler

- Bueno, veras resulta que soy adoptado…. Bueno era adoptado y cuando papá murió hace 6 meses…. Mi verdadero papá llego a vivir conmigo ¿has visto al sujeto gigante que me recoge en la camioneta?

- Hum si

- El es mi papá - dijo Jeff con todo orgullo, Tyler dejo salir un enorme y fuerte silbido, su cara detonaba lo confundido que estaba por la historia.

- Que historia la tuya amigo… deberían filmar una película - dijo Tyler sin mucho interés y después de bajar por unas feas escaleras llegaron al lugar, era justo como Tyler lo había descrito.

- ¿Qué se supone que hacían aquí? - pregunto Jeff interesado, Tyler solo se encogió de hombros.

- No lo se, mira… mi familia es las fundadores del pueblo y como tal guardan muchos secretos… mas con mi abuelo el gran Richard Lockwood como alcalde.

- ¿Espera tu eres el nieto del alcalde? ¿Enserio eres de los fundadores?

- Claro ¿a cuantos tipos conoces con el apellido Lockwood? - pregunto Tyler, Jeff estaba boquiabierto de saber con quien realmente estaba, ahora entendía muchas cosas del pasado.

- Vamos… Winchester ve a la izquierda haber que encuentras, yo voy por el otro lado - dijo Tyler alumbrándole la vista con la linterna, Jeff hizo una mueca y se fue a caminar por el lado indicado, no había mucho mas que una especie de calabozo, cadenas oxidadas, una tela vieja y polvosa y animales muertos.

Jeffrey estaba apunto de regresar a buscar a Tyler cuando el destello de un cristal en el suelo llamo su atención, el metió la mano en el suelo y de ahí logro sacar una especie de caja de cristal negro.

- Es hermosa… ¿Qué será? - se preguntaba a si mismo mientras miraba los extraños gravados en el cristal, ahí fue cuando se dio cuenta de que el objeto era movible y pensando que alguna figura se formaría, le dio la vuelta al cristal y de este una luz blanca y abrazadora lo rodeo.

- Winchester… ven encontré unas armas raras - grito Tyler desde el otro lado del lugar pero al no escuchar respuesta corrió a buscar a Jeff y lo encontró con la mirada perdida y un atuendo elegante de color negro.

- ¿A que hora te cambiaste? - pregunto Tyler, Jeff volteo a mirarlo con un seño fruncido y una risa que le helo la sangre.

- Humano, que asco - murmuro Jeff y camino afuera del lugar, Tyler se quedo en blanco sin entender lo que estaba pasando.

Se trataba de Jeffrey, pero de uno de otro realidad que había cambiado de lugar con el verdadero Jeff quien iba despertando en un mundo oscuro donde la luz del sol no existía, rodeado por una masacre de mujeres en una enorme habitación.

- ¿Pero que demonios…? ¿Dónde estoy? - se pregunto Jeff sin entender por que no había sol y por que había tantos cadáveres a su alrededor.

- Buen día rayito de sombra - dijo Ángel quien iba entrando a la enorme habitación, echando un vistazo aprobatorio a todos los cadáveres de niñas en el lugar.

- ¿Ángel?

- ¿Ángel?... ¿Has estado bebiendo mas sangre de la permitida? - pegunto el vampiro entre risas, se dirigió al armario y saco un abrigo negro de ahí, luego volteo a mirar a Jeffrey con su cara de vampiro.

- ¿Ángelus? - pregunto Jeff titubeante, en los ojos del vampiro había un destello malvado que solo había visto una vez, en la batalla contra la bestia.

- ¿No recuerdo haberte dado autorización de llamarme por mi nombre hijo?

- ¿Hijo? - pregunto incrédulo.

- Sigues bastante dormido para mi gusto… vamos vístete, tenemos que aprovechar nuestro tiempo.- dijo el vampiro antes de lanzarle una gabardina negra a Jeff, el solo abrió el extraño armario y observo el montón de ropa negra y costosa que había, rápidamente se vistió con lo primero que vio y salió detrás del vampiro.

- ¿De quien es esta mansión? ¿Qué hago aquí?

- Enserio Jeffrey, debiste beber mucho anoche y espero que hallas pagado generosamente a esas chicas, no podemos sufrir otra cacería de vampiros en este sucio pueblo.

- Esto es imposible… debe ser un sueño

- Claro que es un sueño hijo, el sueño de todo vampiro es crear un imperio como este y derramar tanta sangre como nosotros.

- ¿De que hablas? Yo no he derramado la sangre de nadie

- ¿Sabes jovencito?… Tu ego me esta molestando y voy a tener que hacer que eso cambie - dijo Ángelus, saco un florete de un viejo armario y se lo arrojo a Jeffrey.

- No quiero verte cometer errores estúpidos, has que tu padre este orgulloso

- No soy tu hijo - dijo Jeff entre dientes, sin embargo el vampiro logro escuchar y le dio el primer golpe con el arma, el niño también hizo lo propio con el florete.

- Debes vigilar tus palabras niñito - dijo el vampiro, Jeff odiaba que la gente lo llamara de esa forma e intento apuñalarlo, el vampiro fue mas rápido y lo sometió en el suelo con el florete.

- El corazón, puede segarte y hacer que luches por tu independencia…. Es natural pero recuerda que soy tu padre y te crie en mi imagen y semejanza para que fueras nuestro mesías - dijo Ángelus, Jeff seguía amenazado por la filosa arma y en su cerebro logro entender que ya no estaba en casa, ni en el mismo Mistyc Falls que el conocía y si no quería morir antes de averiguar como volver tenia que seguir el juego.

- Lo siento padre… he perdido la perspectiva - murmuro, el vampiro le quito el arma del pecho y l acaricio la cara mientras sonreía orgullosamente.

- Para eso estoy aquí, para devolverte al buen camino…. Puedes conquistar todo el mundo hijo

- Lo se padre-

- ¿Sabes? a veces me da miedo pensar en que algún humano pudo haberte adoptado cuando niño, si no hubiera sido por que tu abuelo te encontró en ese callejón… no se donde estarías ahora - dijo Ángelus mientras salía de la sala, Jeff dejó pasar las dudas que tenia y se puso a pensar en donde podría obtener ayuda, al final opto por ir a la biblioteca.

- ¿Papá?... ¿Giles? - pregunto el niño al ver la biblioteca completamente destruida, al igual que la mayoría del pueblo. En ese lugar todo era una zona de guerra.

- No están aquí - murmuro Billie detrás de los viejos estantes, ella al contrario de muchas personas que Jeff había visto, estaba bien vestida y limpia.

- ¿Cuánto llevas aquí Billie?

- He estado dando un paseo, te encanta hacerme esperar ¿no? - pregunto Billie antes de besar al niño, Jeff la alejo rápidamente de el.

- ¿Qué haces?

- Tranquilo Jeff… nadie nos encontrara aquí, ni siquiera tu padre - dijo la muchacha tomando la mano de Jeff en la suya, fue ahí cuando se dio cuenta de una gran diferencia.

- La cicatriz ¿Y tu cicatriz? - pregunto desesperada, Jeff se encogió de hombros con una mueca,

- Maldición… ese maldito uso la caja de espejo, la encontró y no me dijo - dijo molesta.

- Yo la encontré…. Creo que la utilice pero ¿de quien estas hablando Billie?

- De ti… bueno de tu versión mas divertida - aseguro Billie.

- ¿Es un viaje en el tiempo? ¿Donde todo se altero y ahora debo corregirlo? - pregunto Jeff, su amiga empezó a caer en carcajadas.

- ¿De verdad eres tan ingenuo en tu mundo? - pregunto incrédula.

- ¿Mi mundo? Vamos Billie, no entiendo nada… necesito ayuda… debes contarme - rogo el niño, Billie suspiro fuerte antes de hablar.

- Según nuestro Jeffrey, este mundo es tu misma historia pero rescrita en un lado mas oscuro

- ¿Ósea que mi yo malo esta….?

- Esta haya atrapado en tu mundo, apunto de dar rienda suelta a su diversión - exclamo Billie,

- John… necesito encontrar a John Winchester ¿lo conoces?

- Todos conocen a John, es tu verdadero padre…. El que intento detenerte a ti y a Ángelus… será mejor que busques en el cementerio. - dijo Billie pero Jeff salió corriendo con la velocidad de vampiro, con el único pensamiento de detener a su gemelo en el otro mundo entonces escucho los gritos de una mujer en un callejón y fue en su auxilio.

- Oye vampiro, déjala en paz - grito, el vampiro volteo a mirarlo y palideció en un segundo, además de que se arrodillo.

- Señor… mi señor, lo siento debí saber que era su comida… por favor perdóneme - rogaba e vampiro, era la primera que vez que Jeff veía a un vampiro así de asustado así que solo asintió para que se fuera de su vista.

- Ángelus, me hizo un asesino. - murmuro para si mismo.

Mientras tanto en nuestro mundo, el elegante Jeff caminaba por las calles del verdadero Mistyc Falls era evidente que la luz del sol le estaba molestado y estaba desesperado por encontrar algo, así que fue directo a la biblioteca donde encontró a la mayor parte de la pandilla reunida.

- Resulta adorable verlos a todos ustedes, todos los perdedores… juntos. - exclamo el con ironía mientras se abría paso hacia el centro, sus amigos hicieron mala cara al comentario pensando que era una broma.

- ¿Qué te ha pasado? ¿Y esa ropa? - pregunto John al ver el verlo en la tela negra del chaleco de su hijo, era una ropa muy cara que nunca antes le había visto.

- Estoy confuso, no se ni como o por que llegue a este mundo… digo todo es tan… tan desagradable y brillante. - decía Jeff.

- Jeffrey - exclamo John con preocupación, un segundo después tenia a su hijo delante suyo sujetándole el cuello con mucha fuerza.

- Cállate… saben me disgusta mucho no tener sangre en las manos antes de comer y creo que puedo comenzar por el - dijo Jeff, entonces abrió la boca y dejo ver a todos sus largos y brillantes colmillos de vampiros.

- El no es Jeffrey - dijo John apenas entendible, el Jeffrey vampiro le sonrió y sin ocultar sus colmillos le suspiro en la cara.

- Ho claro que lo soy, solo que mas guapo, mas inteligente y sobre todo mas asesino - dijo con orgullo antes de lanzar a John sobre los estantes de libros y dejarlo fuera de la jugada.

- Corran - murmuro Giles, los chicos intentaron hacerlo pero con la velocidad de vampiro el Jeffrey malvado estaba impidiéndoles el paso.

- Ho vamos, apenas estamos comenzando a jugar amigos. - exclamo mientras lanzaba a Xander contra otro estante de libros.

- Déjalo en paz - le grito Giles, el vampiro giro su atención hacia el.

- No se preocupen por el, no me interesa… ahora no quiero volver al mundo de Ángelus, por que ese mundo es de el… este mundo será mío…. Así que ¿Dónde esta la caja? - pregunto molesto.

- ¿Qué caja? - pregunto Willow confundida, escondiéndose detrás de Giles para protegerse.

- La que cambio a su niño y a mí de lugar… la quiero para antes del anochecer o no voy a parar hasta que llueva sangre en el pueblo. - advirtió el vampiro antes de intentar correr por la puerta sin embargo no logro salir debido a que John le disparo un par de flechas con la ballesta.

En el otro mundo Jeffrey había ido al cementerio para buscar a John, después de una breve caminata encontró su tumba, era la mas abandonada en el lugar.

- No se que esta pasando aquí, ni que te hice pero lo siento - decía Jeff al pie de la tumba, el no lloraba por que sabia que su padre seguía vivo en el otro mundo y lo volvería a ver.

- Tu progenitor tendría todo el derecho de estar enojado contigo… considerando que lo matamos -Dijo Ángelus por detrás, Jeff volteo a mirarlo rápidamente.

- ¿Que haces aquí padre?

- Viendo los progresos de mi hijo en el pueblo… veras cuando quite la luz del sol para que pudieras divertirte, lo hice para que alcanzaras tu destino…. Pero recientemente me he dado cuenta de que tu no tienes interés en tu reinado… has estado buscando una misteriosa caja magia a mis espaldas… Y no puedo comprender el por que. - exclamo el vampiro molesto.

- Quería destruirla… quería que estuvieras orgulloso de mi - murmuro Jeff, tratando de sonar lo mas convincente posible y así fue pues el vampiro volvió a acariciarle el rostro.

- Gracias hijo… respecto a la caja, la tiene tu abuelo… el se la quedo hace mucho tiempo y dudo que quiera dártela. - aseguro el vampiro

- No hará falta que quiera - dijo Jeff y salió corriendo del cementerio, no sabia ni quien era su supuesto abuelo en ese mundo pero tendría que averiguarlo pronto, por su parte Ángelus estaba sintiendo algo raro respeto a su pequeño vampiro.

Jeff no sabia por donde comenzar a buscar a su supuesto abuelo, así que busco a Will pues si alguien sabia lo que el buscaba, debida ser ella. Al encontrar a Willow entre las sucias calles, ella empezó a temblar de miedo.

- Por favor no me lastimes, yo solo…

- Esta bien, no soy quien tu crees… no te hare daño Willow.

- ¿Por que debería creerte?

- En otro lugar, somos amigos… y yo se que tienes poderes eres una bruja

- Cualquiera pudo decírtelo - exclamo Willow con enojo, Jeff rodo los ojos pensando en la mejor forma de convencerla.

- Mira no se si en este mundo sea así, pero de donde yo vengo tu has amado a Xander desde Kínder… por favor - rogo Jeffrey con sus ojitos de venado, era una mirada dulce que logro convencer a Willow que estaba delante de otra persona.

- ¿Quien eres?

- Me llamo Jeffrey Winchester y prometo que no hare daño a nadie, solo quiero que me ayudes a encontrar respuestas… ¿te suena mi abuelo?

- Mikael, es el creador de Ángelus y el vampiro más fuerte que se ha conocido…. Vive en la alcaldía, es el alcalde - explico Will, Jeff le sonrió antes de irse como relámpago hacia la alcaldía.

- Tu no eres mi nieto - dijo Mikael recargado en el enorme ventanal de su casa, Jeff camino lentamente dentro de la habitación.

- Solo dame la caja espejo y no volveré

- Te daría la caja si pudiera pero me temo que mi querido hijo Ángelus me la a quitado.

- Ok gracias… me encantaría quedarme a charlar pero no puedo - dijo Jeff con ironía e intento correr sin embargo Mikael lo agarro de la gorra y lo arrojo hacia atrás.

- Yo no dije que podías irte. - dijo el vampiro, Jeff se levanto en un segundo y trato de golpearlo pero el hombre lo volvió a derribar.

- Vamos pequeño, no podrías vencerme ni usando todo tu poder…. Además Ángelus debe estar buscándote ahora, para matarte.

- No soy una amenaza - dijo Jeff entre dientes, el vampiro empezó a reírse de el.

- Claro que lo eres, este mundo… es nuestro y tú tienes el poder suficiente para detenernos, no puedo dejar que eso pase.

- No tengo ese poder

- Claro que lo tienes… pero eres un niño que se educo como princesa, tu nunca vas a saber usar el poder que llevas dentro hijo. - exclamo Ángelus quien iba entrando al lugar con una enorme y macabra sonrisa.

- Yo no soy tu hijo - murmuro Jeff.

- ¿Y jamás lo fuiste verdad?… yo cree tu destino, tu futuro…. Por el amor de dios Jeffrey deje que mataras a todos los vampiros que quisiste, a tu propia familia - decía el vampiro indignado.

- No fui yo

- Te tenia miedo hijo, pero ahora ya no… por que me doy cuenta de que necesitas a tu padre, necesitas una lección - dijo el vampiro empezando am patear el niño en el estomago, el solo se retorcía tratando de levantarse pero el golpe de Mikael había sido tan fuerte que no podía hacerlo.

- Usare la caja y me iré… nunca deberás preocuparte por mi Angelus.

- ¿Preocúpame por ti?... es lo único que he hecho… Lo he sacrificado todo por ti y te falle

- Yo lo elegí

- Lo se yo te hice de esa forma y solo el mas fuerte puede sobrevivir a esto ya sea en este mundo o el otro - decía el vampiro mientras lo golpeaba sin contemplaciones, entonces Mikael apareció por detrás y aparto a su hijo al mostrarle la caja de espejo, eso le dio la ventaja a Jeff para levantarse.

- Gracias por el consejo papá - dijo el con ironía, luego golpeo a Angelus con toda su fuerza y lo arrojo fuera del lugar.

- Tienes que irte ahora - exclamo Mikael dándole la caja de espejo, Jeff la tomo rápidamente.

- Pero tú… tú tienes que destruir esto después, no puedo dejar que el otro regrese a mi mundo

- Es un hecho - aseguro Mikael, Jeff asintió y le dio vuelta a la caja en su mano para después aparecer en una biblioteca iluminada por el sol y destruida.

- Hazlo… hazlo - gritaban sus amigos quien lo tenían rodeado y apuntándole con armas, era claro que habían estado peleando contra el otro sujeto.

- Papá, por favor soy yo - dijo Jeff con las manos en su pecho, tratando de protegerse. John se acerco a su hijo y lo miro directo a los ojos.

- Paren, paren… es el… es Jeffrey - aseguro John para luego abrazar a s pequeño en sus brazos, los demás bajaron las armas y suspiraron con alivio.

Luego de haberle dado un breve resumen de lo acontecido a sus amigos, Jeff y su padre fueron a la propiedad Lockwood donde Jeff había encontrado la caja, estaba dispuesto a destruirla pero ya no estaba, en su lugar solo había nota que decía:

Todavía no estas listo… R.L

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